La selección de Bolivia recibirá a la de Chile en un duelo de alto voltaje en la altitud del estadio de La Paz, donde el conjunto chileno lleva una buena racha de victorias desde 2004 y puede definir su clasificación al Mundial de Rusia 2018.

La selección de Bolivia, hace tiempo sin opciones en de estar en Rusia, quiere evitar a toda costa que Chile consiga los tres puntos en el estadio Hernando Siles, situado a 3.640 metros sobre el nivel del mar, en el contexto de una rivalidad con muchas presiones.

En fases de clasificación mundialistas, Chile se ha impuesto en esa cancha a Bolivia en 2004, 2008 y 2012, en todos los casos por 0-2, y tras su reciente caída ante Paraguay (0-3) le resulta vital volver a ganar en La Paz si quiere asegurar sin angustias su plaza para el Mundial.

Al contrario, al equipo local, dirigido por Mauricio Soria, no le pasa por la cabeza una derrota y según el delantero Marcelo Martins el duelo puede considerarse un "clásico mundial" por la rivalidad deportiva y extradeportiva que rodea los partidos Bolivia-Chile.

"No importa cómo, pero tenemos que ganar", dijo Martins.

Sobre los bolivianos planea la presión de la revancha por la decisión de la FIFA de anular el punto ganado hace un año en Santiago y conceder a Chile un 3-0 debido al caso del jugador paraguayo-boliviano Nelson Cabrera, alineado indebidamente.

Soria parece no tener problema alguno para poner al equipo que quiere en la cancha con la recuperación de todos los jugadores que quedaron lastimados en el partido perdido ante Perú (2-1) en Lima.

El portero Carlos Lampe, los zagueros Edward Zenteno y Ronald Raldes, el centrocampista ofensivo Pablo Escobar, los delanteros Juan Carlos Arce, Martins y Gilbert Álvarez (que marcó el descuento en Lima) están seguros en la columna vertebral de la Verde.

La altitud del estadio Siles no es un problema para los chilenos, como han reconocido los jugadores bolivianos, a la vista de los tres triunfos consecutivos conseguidos por la Roja en La Paz.

El equipo comandado por el argentino Juan Antonio Pizzi se entrena en la ciudad chilena de Calama (norte), situada a 2.400 metros sobre el nivel del mar, con el fin de adaptarse a la altitud paceña y desde donde llegará mañana directamente a la sede del partido.

Para el volante de la selección chilena Marcelo Díaz, a Chile no le sirve "otro resultado que no sea ganar".

"Sabemos lo fuertes que somos como grupo y lo hemos demostrado. Espero que el martes podamos ser ese grupo fuerte para ganar", dijo.

Chile está en la zona de clasificación con 23 puntos, los mismos que tiene Argentina, y detrás de Brasil, Colombia y Uruguay.

El equipo de Pizzi no podrá contar con Gonzalo Jara y Charles Aránguiz, sancionados por acumulación de amarillas en el partido que su equipo perdió ante Paraguay.

La ofensiva de la Roja estará casi con seguridad encargada a Alexis Sánchez y Eduardo Vargas, secundados por Arturo Vidal.

Alienaciones probables

Bolivia: Carlos Lampe; Diego Bejarano, Edward Zenteno, Ronald Raldes, Jorge Flores; Diego Wayar, Leonel Justiniano, Pablo Escobar, Alejandro Chumacero (Juan Carlos Arce), Marcelo Martins Moreno y Gilbert Álvarez.

Chile: Claudio Bravo; Mauricio Isla, Gary Medel, Paulo Díaz, Jean Beausejour; Pedro Pablo Hernández, Marcelo Díaz, Francisco Silva, Arturo Vidal; Alexis Sánchez y Eduardo Vargas.

EFE